Cita a ciegas: ¡Pierda el miedo!

En un mundo donde el ritmo de vida es frenético y el tiempo es un bien escaso, la cita a ciegas se ha consolidado como la herramienta necesaria para encontrar el amor. Cada vez son más las personas que recurren a Internet para encontrar a una pareja estable con la que compartir su vida, sin haberla visto cara a cara.

Sin embargo, a día de hoy existen muchos reparos y prejuicios con respecto a esta práctica. ¿Por qué tenemos miedo? ¿Por qué la sociedad no lo ve con buenos ojos?

Ventajas y desventajas de una cita a ciegas

La cita a ciegas es sinónimo del mundo caótico en el que nos ha tocado vivir: trabajos estresantes, sin tiempo para nada y una menor comunicación entre las personas. Por ello nos vemos inmersos en una búsqueda exhaustiva de la persona perfecta, llegando a optar por la famosa cita a ciegas o las redes sociales. La gran ventaja es que la cita a ciegas nos permite conocer a gente nueva fuera de nuestro círculo de amigos. La desventaja es que todavía no está socialmente aceptado y se ve como una práctica inusual. Existe un cierto temor a la hora de quedar con personas que no conocemos por miedo a que no cumplan nuestros requisitos o que no sean lo que esperábamos. eDarling lo pone más fácil que nunca porque gracias al Test de Compatibilidad, el intercambio de mensajes y las fotos se puede conocer a una persona fácilmente y en profundidad. Tras estos escarceos en la red, queda la prueba de fuego, el verse personalmente.

¿Cómo sobrevivir a una cita a ciegas?

eDarling le da una serie de consejos para que no salga despavorido antes de tiempo y triunfe en esa primera toma de contacto.

Regla de oro: no mienta

No mienta nunca y sea usted mismo. Interiorice este refrán “se pilla antes a un mentiroso que a un cojo”. Antes de quedar cara a cara con la persona, no mienta respecto a su aspecto físico porque al final el perjudicado será usted. No tenga complejos y sea sincero, ya que esa persona se lo agradecerá y seguro que queda hechizada por su honestidad.

Vestuario

Intente conseguir un equilibrio entre ropa elegante e informal. Si aparece en su cita a ciegas vestido de gala, tal vez sea demasiado para la otra persona. Debe estar cómodo con la ropa y sentirse sexy, pero sin pasarse. Tampoco peque de aburrido y escoja ropa discreta pero que realce todo su atractivo físico. Debe derrochar sensualidad, resaltando sus virtudes.

No se ponga nervioso: solo es una cita

Ha llegado el gran momento, siente ansiedad y nervios por esa cita a ciegas tan especial. No es el fin del mundo, intente relajarse porque si queda con esa persona y es un manojo de nervios, probablemente no salga nada bien. Actúe con normalidad y no monte un numerito, ni aparente lo que no es. Puede por ejemplo, preparar de antemano posibles temas de conversación en caso de que tenga que enfrentarse a silencios incómodos. Además, piense que el otro también está nervioso y no solo usted, esto le ayudará a perder el miedo y a desenvolverse con soltura.

Falsas esperanzas

No se haga ilusiones y cree expectativas en la primera cita, de que todo va a ser un cuento de hadas como en las películas románticas de Hollywood. Simplemente vaya a su cita a ciegas siendo realista y con los pies sobre la tierra. No piense ni que va a ser la persona de su vida ni que mañana mismo se va a mudar con ella, ni tampoco se vaya al otro extremo y se obsesione con que es un psicópata o un bicho raro. Simplemente vaya pensando que va a pasar un rato agradable, sin grandes esperanzas y déjese sorprender por lo que la vida le depare.

Comodín: llamada de un amigo

Puede decirle a un amigo que le llame una hora después de la cita, para saber si le está yendo bien o si por el contrario tiene que ir a rescatarle. Es una buena solución en casos extremos.

No llegue tarde

Llegar tarde no es un gran comienzo en una cita a ciegas. Si por circunstancias imprevistas va a llegar tarde, avise a la otra persona y así no proyectará una imagen de irresponsabilidad. En cambio, si la otra persona no aparece y usted la está llamando y no contesta, dele una oportunidad. Tal vez se haya metido en un atasco o haya tenido un problema, no piense en negativo: tal vez no sea una excusa para dejarle plantado. En este tipo de circunstancias, dele un margen de 20 minutos y si no aparece, entonces delo por terminado. De todas formas, intente averiguar el motivo por el que la otra persona no pudo ir a la cita.

Alcohol: desinhibidor sí, pero hasta cierto punto

Beber alcohol en grandes cantidades es un error en una cita a ciegas, ya que acabar borracho diciendo sandeces, no es la mejor forma de conocer en profundidad a una persona. Recuerde que bajo los efectos del alcohol todos los gatos son pardos: puede arrepentirse más adelante. Así que disfrute de una buena copa de vino o cerveza, pero no de toda la botella ¡Mantenga la compostura!

La intuición nunca falla

En una cita a ciegas dejarnos guiar por nuestra intuición es un buen punto de partida. Ver a una persona y sentir ese cosquilleo de que encajan es una buena señal. También puede ocurrir todo lo contrario, que desde el primer momento sienta que no se atraen y que no tienen nada en común. Confíe en su sexto sentido y en su fuero interno… ¡Verá como no le defrauda!

Tema de conversación

Al principio para romper el hielo, la conversación puede tratar sobre temas como: trabajo, viajes, hobbies, etc. Si ve que a medida que avanza la conversación va fluyendo una cierta complicidad y sinceridad, es el momento de pasar a un segundo nivel y dirigir la conversación a temas más personales. No sea indiscreto y no pregunte por cosas muy controvertidas o raras, simplemente sobre cosas un poco más personales, para poder conocerle mejor. Está absolutamente prohibido preguntarle sobre su ex porque seguro que le traerá recuerdos dolorosos, mejor no mencionar este tema en una cita a ciegas, eso se puede dejar para más adelante en futuras quedadas.

No cuente sus penas

Está en una cita a ciegas para pasárselo bien, no para ponerse sensible y acabar llorando. Evite ponerse dramático, depresivo y contarle sus malas experiencias porque acabará asustando a esa persona. Mejor que se dedique a hablar de cosas positivas. No está en el psicólogo, está teniendo una cita. Los momentos íntimos es mejor dejarlos para más adelante, cuando se conozcan mejor.

Sea positivo

La cita a ciegas ha sido un desastre y se siente un tanto deprimido ¿y qué? No pasa nada. Piense que por lo menos lo intentó y saque el lado positivo de la experiencia. Tal vez no era la persona adecuada porque la persona de su vida está por llegar. Así que alégrese de que al menos tuvo el coraje de probar algo diferente.

¿Ha acudido a una cita a ciegas? ¿Ha sido un desastre o por el contrario, se lo ha pasado en grande? Cuéntenos su experiencia.

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